Cada gota cuenta... preparación del bailarín
Para el bailarín, el cuerpo es un instrumento de vital importancia para la creación de su arte. Resulta clave en este camino, entonces, contar con una óptima condición física, que le permita reducir riesgos de lesión, así como la mejora en el rendimiento.
Entrenamiento de flexibilidad para bailarines
Un bailarín en buena forma física es capaz de satisfacer tareas con el mejor rendimiento posible. Una buena condición mental y preparación física pueden, incluso, garantizar carreras más longevas en el campo artístico. Un bailarín completo cuenta con capacidades cognitivas y físicas; es decir, una sensibilidad e interpretación que conmuevan al público, acompañada de potencia, resistencia y velocidad. Estas habilidades le dan armas para cumplir con sus metas.
Tres pilares básicos de la danza: potencia, resistencia y velocidad
El acondicionamiento físico necesario para un bailarín incluye:
- Entrenamiento aeróbico
- Entrenamiento anaeróbico
- Entrenamiento de flexibilidad
- Descanso
En primer lugar, un entrenamiento aeróbico es de suma importancia para el bailarín pues mientras más tiempo este pueda trabajar con frecuencias cardiacas moderadas, menor será la fatiga que pueda sentir. La danza por sí sola provee mejoras en la capacidad aeróbica. El requerimiento físico de los ensayos de baile, necesarios para cualquier persona dedicada a la danza, obliga al bailarín a buscar actividades aeróbicas complementarias. Actividades aeróbicas recomendadas incluyen: correr, nadar y manejar bicicleta.
Si hablamos de entrenamiento anaeróbico, nos referimos a una actividad breve, de gran intensidad, con la cual el metabolismo desarrolla los músculos y la energía. Esta actividad ayuda a tonificar los músculos y alinear desviaciones en las articulaciones. Dentro del entrenamiento anaeróbico están incluidos los ejercicios ejecutados con máquinas de peso, como los abdominales, sentadillas y pilates. Cualquier ejercicio de esfuerzo breve constituye un ejercicio anaeróbico.
En este camino cabe destacar la importancia de entrenar la flexibilidad. Resulta de enorme interés para el bailarín complementar su fuerza muscular con la eficacia en el movimiento y su coordinación, para evitar así lesiones que afecten su desempeño artístico. Los músculos deben estirarse durante un periodo prolongado de tiempo, para lograr que la fibra muscular se acostumbre, aumentando de esta forma la flexibilidad. Ha de prestarse atención a la respiración durante el estiramiento, coordinando rítmicamente la inhalación y exhalación. Regularmente se lleva a cabo una serie de estiramientos previos al ensayo, así como en el momento de culminación.
Por último, el descanso es la recuperación física necesaria para que el bailarín pueda regenerar sus músculos entre sesiones de entrenamiento y ensayo, disminuyendo su riesgo de lesión y la fatiga natural a las actividades. El entrenamiento continuo sin descanso pertinente es denominado sobreentrenamiento, perjudicial para el rendimiento físico. Esta práctica negativa puede generar descenso en la motivación del bailarín.
Algunos consejos de suma utilidad para evitar las malas prácticas físicas son:
- Mantener una dieta saludable
- Hidratarse con regularidad
- Procurar el descanso y sueño suficientes
Principales consejos para potenciar el rendimiento artístico
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Fuentes: abcdanzar.blogspot.com
iadms.org
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